Puntos de vacunación en el transporte municipal. El Ministerio de Salud Pública (MSP) en coordinación con la Secretaría de Salud del Municipio de Quito y la Empresa Pública Metropolitana de Transporte de Pasajeros (Epmtpq), habilitaron nuevos puntos de inoculación en la Estación El Recreo y la Terminal Quitumbe del Transporte Municipal que estarán operativos desde el 27 de agosto hasta el 13 de septiembre.

En estos puntos se suministrarán vacunas contra el Covid-19 en el horario de 08:00 a 16:00 horas de manera ininterrumpida.

• Pfizer: Primera y segunda dosis (Primera dosis solo a personas de 16 y 17 años o con enfermedades catastróficas previa presentación de su certificado).
• Sinovac y Astrazeneca: Segunda dosis.
• Cansino: Una sola dosis, disponible para personas de entre 18 a 60 años.

El gerente de la Empresa de Pasajeros, Carlos Poveda, indicó “estamos trabajando en conjunto con el Ministerio y la Secretaría para ver si existe la posibilidad de habilitar más puntos de inoculación en otras estaciones para facilitar a la ciudadanía su aplicación y aportar a la reactivación económica de la ciudad”.

Sofía Lara, usuaria frecuente del Trolebús, manifestó que “es de mucha ayuda poner estos lugares para vacunarse, porque existen muchas personas que no tienen tiempo de ir donde les toca y ahora lo podrán hacer en el transporte”.

Invitamos a la ciudadanía a seguirnos como @TransporteQuito en Facebook y Twitter, para informarse en tiempo real sobre las acciones emprendidas en el transporte metropolitano.

La vacunación es una forma sencilla, inocua y eficaz de protegernos contra enfermedades dañinas antes de entrar en contacto con ellas. Las vacunas activan las defensas naturales del organismo para que aprendan a resistir a infecciones específicas, y fortalecen el sistema inmunitario.

Tras vacunarnos, nuestro sistema inmunitario produce anticuerpos, como ocurre cuando nos exponemos a una enfermedad, con la diferencia de que las vacunas contienen solamente microbios (como virus o bacterias) muertos o debilitados y no causan enfermedades ni complicaciones.

La mayoría de las vacunas se inyectan, pero otras se ingieren (vía oral) o se nebulizan en la nariz.